Mi estancia en La Casa de la Montaña fue realmente agradable. El valor por mi dinero fue excelente, y la habitación era limpia y fresca. La ubicación era perfecta, rodeada de calma y silencio absoluto. Pero lo que realmente hizo especial mi estancia fue el trato de Moira y Salvador, los propietarios. Su amabilidad y simpatía me hicieron sentir como en casa. Además, su preocupación por el medio ambiente fue inspiradora. Sin duda, fue el lugar perfecto para desconectar.

La oferta de desayunos podría haber sido mejor. Me hubiera gustado más variedad y opciones.

¡Una experiencia increíble! Nos sentimos como en casa desde el primer momento. Salvador y Moira son simplemente excepcionales. La casa y el entorno son fabulosos. La habitación es súper grande y acogedora, con una chimenea perfecta para el invierno. En verano, es fresquita durante el día y perfecta por las noches. Todo está cuidado al detalle, con un toque bucólico y un gran respeto al medio ambiente. La ubicación es perfecta, rodeada de naturaleza y con sendas recomendadas por Salva para disfrutar al máximo. Moira es una excelente cocinera y Salvador es un genial conversador. ¡Todo ha sido perfecto!

Increíble refugio en medio de la naturaleza. Atención espectacular, propietarios amables y encantadores. La calidez y la conexión con el medio ambiente son impresionantes. Ideal para desconectar. ¡Volveremos sin duda! ✨

Me encantó la tranquilidad absoluta que encontré durante mis vacaciones en este lugar. Está completamente apartado del pueblo y rodeado de naturaleza, lo cual ofreció una experiencia única. Además, me sorprendió gratamente el concepto sostenible del hotel, perfectamente integrado en el entorno. La limpieza y comodidad fueron aspectos que no dejaron nada que desear, y disfruté de la cocina casera, con pan hecho por ellos mismos y pizzas deliciosas. También debo mencionar la amabilidad y atención de los responsables, quienes realmente se preocuparon por asegurarse de que mi estadía fuera perfecta.

Debo admitir que hubo algunos aspectos negativos. Además, me encontré con la falta de algunos artículos básicos de higiene, y la falta de limpieza en las zonas comunes.

Nos encantó la experiencia en La Casa de la Montaña. Pasamos unos días maravillosos en medio de la naturaleza, desconectando por completo. El entorno es único, rodeado de montañas y senderos para explorar. Los dueños, Moira y Salvador, son muy amables y serviciales. El albergue está bien cuidado y restaurado, y te hace sentir como en un lugar especial y conectado con la naturaleza. La ubicación es excelente, con mucha calma y silencio absoluto. Además, nos adaptaron la comida a nuestras preferencias veganas sin ningún problema. La comunicación con ellos desde la reserva ha sido estupenda.

Puedo recomendar este hotel a todos.

Excelente ubicación con calma y silencio absoluto. Habitaciones limpias y frescas. Anfitriones amables y muy buenos. Comida adaptada a mi elección vegana.

Mentalidad ecológica excepcional

Bosque alrededor del albergue. Sensación de estar conectado con la naturaleza.- Calidez de los propietarios.- Mascotas encantadoras.- Casa acojedora en todos los sentidos.- Entorno de naturaleza viva.- Información sobre el entorno ofrecida por Salvador

Sin problemas.

La estancia en La Casa de la Montaña fue increíble. El valor que obtuvimos por nuestro dinero fue excelente y la habitación era fantástica. El entorno en plena naturaleza era precioso y el personal nos trató de maravilla.

La comida del desayuno podría mejorar ofreciendo más opciones.

La ubicación del hotel es excelente, ofreciendo calma y silencio absoluto. Además, está rodeado de un bosque hermoso y varias fuentes de agua. El entorno natural es simplemente maravilloso.

Todo fue maravilloso.

Nuestro propósito de viaje fue relajarnos y disfrutar de la naturaleza, y La Casa de la Montaña Hostal nos ofreció exactamente eso. Nos encantó la ubicación tranquila y rodeada de naturaleza, así como la amplitud de las habitaciones y la casa en general. El dueño fue muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudarnos en cualquier cosa. Además, tuvimos la oportunidad de hacer una barbacoa, lo cual fue genial. En resumen, una experiencia rural encantadora y única.

Desconexión total en un entorno natural privilegiado

Aceptan mascotas sin problemas. Atención personalizada y conversaciones agradables

No hay nada malo que decir.

el hotel rural La Casa de la Montaña es un lugar excepcional para desconectar de la ciudad y reconectar con la naturaleza. Las habitaciones son perfectas, con camas cómodas y una temperatura agradable. Destaco el servicio de Salvador y Moira, siempre atentos y con recomendaciones excelentes. El desayuno es delicioso y la tranquilidad del entorno es inmejorable. Sin duda, repetiré.

Falta de claridad en la comunicación de la reserva.

Entorno precioso en medio del bosque. Trato adecuado por parte de los responsables.- Tranquilidad y hospitalidad.- Limpieza y comodidad de las habitaciones.- Disponibilidad de numerosas opciones de rutas.- Privilegiada ubicación en plena naturaleza.- Anfitrión atento y sabio.- Amigable con los animales.

No.

Resaltando lo positivo. Encontré una excelente relación calidad-precio en La Casa de la Montaña Hostal. La habitación era cómoda y acogedora, y la ubicación en medio de la naturaleza era impresionante. El trato del personal fue amable y atento en todo momento.

Para mejorar, la comida del desayuno podría ser más variada.

El lugar es excepcional, con mucha tranquilidad y en plena naturaleza. El dueño, Salva, es muy amable y servicial. La cama doble es muy cómoda. El entorno es ideal para desconectar y conectar con la naturaleza. Los dueños del albergue son amigables y nos recomendaron lugares para visitar.

Lo vivimos como una verdadera escapada, no tenemos ninguna queja.